
Enfoque de derecho humano
El acceso universal a formas modernas de energía es un derecho humano que se deriva implícitamente de, entre otros, el Pacto Internacional de Derechos Económicos, Sociales y Culturales. La Mesa se compromete a hacer sus mejores esfuerzos para que este derecho sea reconocido explícitamente como tal por las diferentes organizaciones a todos los niveles.

El acceso como responsabilidad de todos
El Acceso universal a la energía es una responsabilidad compartida por todos, pero de forma diferenciada. El rol del Estado como facilitador y actor se considera esencial. Y no sólo a nivel nacional. En los entornos rurales las administraciones locales tienen un papel relevante. Sus capacidades para ello deben ser fortalecidas.
Propiciamos el compromiso conjunto y las actuaciones coordinadas de las administraciones públicas, la iniciativa privada y la sociedad civil encabezada por los propios afectados, como medio más eficaz de abordar los problemas de acceso universal a la energía.

Acceso Universal a la Energía y desarrollo humano
La energía es un facilitador del desarrollo. Sin energía no puede haber desarrollo, pero con sólo la energía no es suficiente para generar desarrollo. Más allá del acceso energético debe coadyuvar a conseguir un verdadero desarrollo de las personas.

Nivel de acceso a la energía
El nivel de acceso a la energía debe ser el adecuado que permita una vida digna y posibilite el desarrollo humano.
El acceso energético puede ser progresivo pasando por diferentes niveles. Son bienvenidas las intervenciones que mejoren el nivel de acceso energético, aunque no lleguen a conseguir el nivel básico deseable, siempre que impliquen mejora en las condiciones de vida e impacto social positivo.

Sosteniblidad
Cualquier intervención para facilitar el acceso a la energía debe considerar inexcusablemente su sostenibilidad económica, medioambiental y social. El objetivo de estas intervenciones debe centrarse en maximizar el impacto social, optimizando su impacto medioambiental y considerando su sostenibilidad económica a medio y largo plazo.
La sostenibilidad económica debe partir de la asequibilidad de las soluciones para los usuarios de los servicios energéticos, existan o no subsidios que complementen el pago por parte de las poblaciones con menos ingresos.

Innovación
El acceso energético a las comunidades rurales aisladas requiere de modelos de provisión de servicio innovadores con participación activa de los usuarios finales. En concreto, en la electrificación con sistemas aislados los modelos son muy diferentes de los modelos convencionales basados en generación centralizada, economías de escala e intensificación en capital.
Documentos
Alcanzar la última milla
Energía asequible, segura, sostenible y moderna para todas las personas